Me ha dado la sensación que este invierno se viene fuertísimo. Estamos recién en otoño y los días han estado muy fríos, con harta escarcha y humedad. Esto favorece que se presenten los cambios de temperatura al entrar y salir de nuestras casas, trabajos, comercio, etc.
Las condiciones extremas de frío, viento, nieve y lluvia afectan directamente la piel de forma negativa si no nos cuidamos correctamente. La circulación sanguínea se vuelve más lenta, comienzan a aparecer “venas” y la piel se siente más tirante, porque está deshidratada. Las pieles sensibles, irritables y con rosácea son las más afectadas.
En este artículo te voy a dar los cuatro principales tips para que cuides tu piel bajo este ambiente de mucho frío y espacios cerrados temperados.
1.- Dúchate con agua templada, ni muy fría ni muy caliente. Sé que es muy tentador ducharse con agua bien caliente, pero esto sólo va a provocar enrojecimiento, picor, resequedad e incluso dermatitis.
2.- Aplica tónico y crema hidratante inmediatamente después de la ducha. Es importante que la crema de día que uses sea hidratante y humectante. Esta última característica es esencial, ya que la crema hace como barrera protectora para que la piel no pierda el agua y aceites que la mantienen humectada.
3.- Usar siempre, siempre, siempre, protector solar. Más aún si trabajas al aire libre, haces deportes outdoor o si caminas mucho.
4.- Mantente hidratada incluso en invierno. Tomar mínimo un litro y medio de agua diario. Las infusiones cuentan si las tomas sin azúcar ni endulzante, esta es una buena forma de hidratación para los meses fríos. Manzanilla, boldo y melisa son mis favoritas.
En Frantziska tenemos productos para que cuides tu piel de la mejor forma. Puedes escribirnos por Instagram @laser.frantziska o también por WhatsApp al +56953829757.
Por Francisca Sekulovic
Ingeniera Comercial, Cosmetóloga y fundadora de Láser Frantziska
