• Elaborada artesanalmente en Punta Arenas por Ninoska Águila y Miguel Serka, esta bebida gana cada vez más seguidores por sus probióticos y versatilidad, siendo preferida en ayuno, acompañando comidas o en tragos. La receta de Carancho posee bajo nivel de azúcar y se puede encontrar en sabor original, jengibre y cardamomo”.
La kombucha es una bebida natural fermentada, elaborada a base de té, a la que se le atribuye múltiples beneficios para la salud.
Algunos dicen que es el refresco de moda, y que todos deben probarla. Otros se convirtieron rápidamente en “kombucha lovers” por su efecto refrescante y probiótico.
Lo cierto es que, con la actual tendencia de reemplazar el consumo de productos procesados por opciones más saludables, esta infusión ocupa el espacio natural de los bebestibles, y gracias a su versatilidad puede acompañar almuerzos, incluirse en tragos, ser la alternativa diaria para mejorar la digestión o simplemente disfrutarla para hidratarse.
Su origen milenario explica en gran medida los atributos que se le reconocen a nivel mundial. En Magallanes, la pareja de emprendedores Ninoska Águila y Miguel Serka, de consumidores de su receta cien por ciento artesanal, pasaron a fundar Carancho Kombucha, siendo los principales productores de esta bebida a nivel local.
El origen
“Buscando innovar en la cocina, los fermentados nos llamaban la atención por las propiedades que poseen. Comenzamos a probar las kombuchas que se vendían en el comercio, y no nos gustaban, pero algo nos decía que no podía ser que ninguna nos gustara, así que en 2018 apoyados en tutoriales empezamos a preparar nuestras primeras kombuchas, que al comienzo eran para consumo personal, después compartíamos con familiares y amigos cuando nos visitaban, todos nos daban buenos comentarios y nos pedían para llevar a sus casas, hasta que en el año 2021 decidimos crear nuestro emprendimiento que llamamos Carancho Kombucha”, relata Miguel.
Desde ese momento el trabajo se ha vuelto intenso, porque al ser una bebida fermentada, y cien por ciento viva, requiere de mucha dedicación y tiempo para entender el comportamiento de las levaduras y bacterias, y así llegar al instante preciso de envasado, resguardando en todo momento la calidad del producto.
¿Y por qué Carancho?… Así nos dicen cuando nos conocen; y es que no hay una respuesta absoluta, solo nos sedujo la hermosura y habilidades de esta ave. Tenemos la convicción que llegaremos tan lejos como sus recorridos por el aire, cuentan sus fundadores Ninoska y Miguel.
“Siempre digo que la kombucha es otro integrante de la familia, porque al ser una bebida viva, reacciona de manera distinta a estímulos como la temperatura, por lo que cada producción de kombucha no es igual a otra, necesitando mucho cuidado y control”, explica Ninoska.
Litros y más litros
La primera producción de Carancho Kombucha salió al mercado en septiembre de 2021, con 81 botellas que se vendieron antes del lanzamiento oficial. Desde ese momento, han tenido peak de productividad de hasta 600 botellas, un número altísimo considerando que todo el proceso se realiza de manera artesanal y manual. Sin duda, dieron con la receta perfecta para elaborar esta bebida burbujeante en tres sabores: Original, Jengibre y Cardamomo.
“Tenemos diversos puntos de venta de Punta Arenas, y también estamos llegando a las capitales provinciales. Nos pasó algo muy lindo en Natales, Carancho Kombucha tuvo una muy buena recepción, porque es un producto regional, natural, de elaboración artesanal, que hace mucho sentido a los turistas, así que se nos ha abierto un espacio que valoramos mucho”, destaca Ninoska.
Beneficios y propiedades
Quienes conocen la kombucha o al investigar sobre el producto, resaltan su aporte digestivo y en el metabolismo, además de la presencia de vitaminas, minerales y antioxidantes.
“Nosotros tenemos clientes que nos han contado que desde que consumen nuestra kombucha dejaron de sentir inflamación en el estómago, a otros les mejoró la digestión. Algunos toman kombucha porque quieren hacer un cambio saludable respecto a lo que consumen día a día, y otros porque simplemente les gusta”, afirma Ninoska.
La experiencia con esta bebida es personal porque cada marca tiene su sello. Carancho se destaca por su característica natural y no presenta contraindicaciones bajo un consumo responsable. “Nuestra kombucha tiene un tercio de azúcar en comparación a una bebida normal, no tiene azúcar añadida ni endulzantes, además el gas es natural. Todo eso se combina de manera perfecta para conseguir su sabor refrescante”, destaca Miguel.
El formato de venta, de 330 ml por botella, es la dosis recomendada para consumo diario, siendo el máximo sugerido un litro al día.
Compromiso sustentable
Carancho Kombucha nació con espíritu libre, carácter y compromiso con el entorno, porque no solamente es un producto elaborado de manera artesanal, a escala humana, sin uso de preservantes artificiales, sino que también asumió una responsabilidad medioambiental.
“Nosotros queremos que nuestra huella de carbono sea la mínima posible. No queremos ver una botella de Carancho botada en la calle, contaminando, por ello implementamos el sistema de retorno de las botellas, otorgando un descuento en la próxima compra. No es fácil para una pyme pequeña generar toda la logística necesaria para reutilizar, pero no podríamos cargar con la sensación de que estamos vendiendo un producto natural, y al mismo tiempo estamos contaminando”, explica Miguel.
Durante estos dos años de vuelo del emprendimiento, Carancho se ha convertido en una comunidad, donde el reconocimiento del producto sigue conquistando paladares. Recientemente Carancho Kombucha es una marca registrada, lo que permite el posicionamiento de esta bebida con sello magallánico en el mercado nacional.
Quienes deseen probar un cambio y disfrutar de esta infusión artesanal, mientras aportan a su salud y al medio ambiente, pueden contactarse con Carancho Kombucha a través de la cuenta en Instagram @caranchokombucha o acercarse a locales de venta, como Emporio Dos Peces, ubicado en Pedro Montt #957, Punta Arenas.